01 FEBRERO: ¿MARCHA ANTIFASCISTA O UNIDAD OBRERA Y POPULAR PARA DERROTAR AL PLAN CAPITALISTA DE MILEI?

Editorial Nro 49 - 31 de enero de 2025

Milei se despachó en Davos con una retahíla de ataques homofóbicos, racistas y misóginos buscando confrontar a progresistas y reformistas y polarizar contra el kirchnerismo en la batalla electoral que se viene. La Asamblea de Parque Lezama así como muchas otras en el país rechazando las barbaridades que dijo, abrieron la posibilidad de una convocatoria independiente, pero rápidamente peronistas, kirchneristas, burócratas sindicales, organizaciones de ddhh cooptadas y corrompidas por el kirchnerismo y todo tipo de figurones del gobierno anterior y sus cómplices corrieron a ponerse a la cabeza para enchalecar las marchas y desviarlas con un propósito electoral.

El capitalismo mundial, en su descomposición y agonía, no solo nos somete al hambre, sino también pone cada vez más en peligro libertades democráticas o derechos que se suponían consolidados, como el derecho al aborto. Esto no es propio solo del gobierno de Milei: en Chile, el "izquierdista" Boric —utilizando tecnología de la entidad nazi sionista de Israel—, promulgó una ley antiterrorista mucho peor que la que tenía Piñera y que deja como un juego de niños la intentona de Bullrrich para controlar las redes sociales. En Colombia, el "progresista" Petro mantiene presos políticos a héroes de la Primera Línea de la Revolución de 2019, que se están pudriendo en las cárceles como si fueran delincuentes y no héroes de la lucha popular. Lo mismo hace Boric en Chile. Es decir, el peligro no es solo el discurso de Trump o de Milei, es la tendencia general del capitalismo en todos los países. Ni hablemos de férreas dictaduras capitalistas como China, Rusia, Venezuela, Cuba, Irán o Nicaragua, con su negación de los derechos de las mujeres, minorías y diversidades, desde la minoría uigur esclavizada en campos de concentración de China, la persecución a los homosexuales en Rusia, la opresión a las mujeres en Irán o la represión desembozada en Venezuela, Cuba o Nicaragua.

El reciente triunfo de la revolución siria contra el dictador Bashar al-Ásad y el triunfo de la Intifada Palestina contra los ocupantes sionistas, darán un impulso impresionante a la lucha de clases a nivel mundial, contra todo tipo de gobiernos que con distintos ropajes e ideologías defienden este sistema capitalista explotador y opresor.

Argentina no es ni será una excepción a ese impulso de lucha. Después de lograr el blanqueo de capitales de evasores, narcotraficantes y todo tipo de delincuentes, ahora el gobierno espera con desesperación los dólares que aportarán los agroexportadores, mientras negocia con el FMI un nuevo y millonario préstamo que mantenga la ficción de una economía que está quebrada. El plan de Milei, acordado con el imperialismo y los grandes empresarios, nos seguirá hundiendo en el hambre, la miseria y la desocupación y debe ser enfrentado en todos sus aspectos. Pero para poder derrotarlo es necesario tener una caracterización precisa de a qué tipo de gobierno nos enfrentamos.

No es cierto que estemos ante un gobierno fascista o dictatorial, más allá de la ideología reaccionaria del presidente. Esa falsa caracterización lleva invariablemente a la unidad con todo tipo de supuestos "opositores" al fascismo. Así, por ejemplo, la marcha de este sábado está apoyada por personajes como Cristina o Kicillof, responsables fundamentales de la miseria y la decadencia del país. Mientras escribimos este artículo tomamos conocimiento de una violenta represión policial en el municipio de Moreno, gobernado por la peronista Mariel Fernández, contra el justo reclamo de jóvenes trabajadores por aplicación, ante el alevoso asesinato de su compañero Lucas Aguilar. Lucas apenas unos días antes había denunciado la inseguridad del municipio y el hecho de que la policía tiene zonas liberadas a la delincuencia.

No es uniéndonos a estos personajes mafiosos que vamos a derrotar a Milei porque esa opción es la variable "progresista" de esta misma miseria. Por eso ambos sectores hablan de la famosa "batalla cultural". Pero cuando se trata de la confrontación entre capitalistas y trabajadores, no hay ninguna batalla cultural ni grieta que los separe, por eso vemos el constante tráfico de personajes que se trasvasan de unas fuerzas politicas burguesas a otras sin problemas. ¿No es acaso Scioli, ex candidato presidencial por el kirchnerismo, un converso mileísta hoy? ¿No es el ladrón Kuider el mismo que militó décadas en el kirchnerismo? Dice Cristina que Milei es oscurantista, ¿y su ministro de salud Manzur que obligaba a niñas embarazadas a parir, cómo se califica? Dice que se opone a la opresión de la mujer ¿y por qué es aliada de un violador como Alperovich? El asesinato de Cecilia Strzyzowski a manos del clan Sena en Chaco, aliados de Capitanich ¿no califica como femicidio? Son todos una manga de hipócritas que están en el mismo barro. La izquierda parlamentaria, con sus estériles proyectos de todo tipo y color en esa cueva de corruptos y tránsfugas que es el Congreso hace parte de esta misma política nefasta.

El ataque a mujeres, diversidades y migrantes por parte de Milei, no puede enfrentarse en alianza con la nefasta oposición patronal ni tampoco separado de un programa de lucha por la liberación de toda la clase trabajadora. No es a través de ministerios refugios de burócratas acomodados/as que se logrará la liberación de las mujeres, las diversidades y la totalidad de la clase obrera y todos los sectores oprimidos por este sistema nefasto. Es necesario derrotar a este plan que es el plan de los capitalistas, para abrir el camino a un gobierno de la clase obrera, que planificando y centralizando la economía en servicio de la mayoría trabajadora podrá solucionar el problema del hambre, el empleo, la vivienda, el cuidado del medio ambiente y la más completa libertad e igualdad real y no solo jurídica, para mujeres y minorías oprimidas, terminando de paso con la violencia machista y la explotación sexual.

Las marchas de este sábado no solo deben ser contra los ataques a las diversidades y mujeres, sino en rechazo al plan de recesión y hambre que se profundiza cada mes y que el gobierno lleva adelante gracias a esa misma oposición que se escandaliza por su dichos y también con el apoyo completo de la burocracia sindical.

• Abajo el plan Capitalista de Milei, sostenido por el PJ y el resto de los partidos patronales!
• Abajo los burócratas peronistas y los jerarcas de todo tipo y color! Por la autorganización independiente de las masas en lucha!
• Por un gobierno de la clase obrera y el pueblo pobre y oprimido!

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