LA ABSTENCIÓN Y EL VOTO EN BLANCO 1era FUERZA POLITICA
El pueblo rechazo masivamente a los partidos capitalistas y reformistas
Nuevo PST y La Marx Argentina 14/09/21
En una elección que marca un hito, prácticamente de la mitad del pueblo le dio la espalda a los partidos e instituciones del capitalismo argentino. Más de 14.144.145 millones se abstuvieron y votaron en blanco/nulo (42%), los datos más altos de la historia. Se abstuvieron un total de 12.493.856 de votantes, en un porcentaje que constituye el 37% del padrón electoral. Mientras que por otro lado, 1.650.289 de personas votaron en blanco/nulo, un 5% del padrón electoral en todo el país.
Esos porcentajes sin precedentes son expresión de la bronca, el odio, el rechazo y la ruptura del pueblo con el Partido Justicialista (PJ), y todos los partidos del corrupto régimen de la democracia capitalista. En ese marco de rechazo, el porcentaje de la población que fue a votar, es el porcentaje más bajo de la historia. Quienes fueron, usaron el voto útil para castigar y propinarle un nocaut al gobierno de Alberto y Cristina. El PJ y el Kirchnerismo perdieron en la mayor parte del país, entre ellas, en bastiones como Santa Cruz, o la Provincia de Bs. As.
Postales de la rebelión de las masas contra las elecciones. Personas humildes, que mostraron su ingenio con collages, y cartas para rechazar al gobierno y partidos capitalistas. Escuelas vacías, con poca asistencia
Un sector del imperialismo, de los medios de comunicación opinólogos, y una parte de la izquierda hablan de un "giro a la derecha" o "giro conservador", en la Argentina. Nada más alejado de la realidad. De esta elección salen débiles todos los partidos y organizaciones capitalistas. El tembladeral que ha provocado la acción de las masas, hizo expresar a algunos de los dirigentes de la ganadora coalición capitalista Juntos x el Cambio con la frase: "No hay nada que festejar".
Los medios de comunicación, y dirigentes capitalistas mienten a las masas hablando de un triunfo del la coalición capitalista Juntos por el Cambio (JxC) con 41%, seguido del peronismo seguido del 32%. Es falso. Presentan la realidad de las elecciones con datos basados únicamente en el sector que fue a votar. Pero si se contabiliza a todo el pueblo, y se incluye a los mas de 14 millones que rechazaron la elección, en realidad los "ganadores" del JxC solo representan al 26%, mientras que el Frente de Todos de Alberto y Cristina solo tiene el 20% de apoyo.
JxC perdió votos en relación a a su anterior votación, pero su triunfo aparece contundente no tanto por el apoyo recibido de las masas, sino por que se derrumbó el PJ. Estos datos dan cuenta de que no existe ningún "giro conservador", al contrario, la acción de las masas ha dejado en situación de grave debilidad a los partidos capitalistas, los cuales tienen en este momento el rechazo masivo del pueblo.
La ola abstencionista que recorre el mundo llego a la Argentina
Este resultado dejó al gobierno al gobierno de Alberto y Cristina, a todo el PJ, y al kirchnerismo en una profunda debilidad. Las palabras de Alberto Fernández en su discurso de derrota fue: "Solo quiero terminar mi mandato". Los guarismos que registran las elecciones de Argentina son similares a los mismos de Perú, México, Chile, y de los países y de todos los continentes donde las cifras de abstención y rechazo a los partidos capitalistas alcanzan índices históricos, como en Francia.
La "ola abstencionista" que recorre el mundo llegó a las elecciones 2021, y se expresó "a la argentina" con datos tremendamente significativos. Como que por ejemplo, el voto bronca y abstención sumados del 42%, es similar al del 2001, cuando se produjo el "Argentinazo" que alcanzó al 46%. Otra expresión del rechazo de las masas a la democracia burguesa, fue la masiva deserción del 50% de autoridades de los comicios que tenían que controlar las mesas, y no se presentaron, sumados a los que rechazaron asumir la autoridad ante las ausencias. Estos datos son contundentes, mas teniendo en cuenta que a diferencia e otros países, en Argentina el voto es obligatorio.
Un frente de los partidos políticos capitalistas, funcionarios, dirigentes, analistas, medios de comunicación, burócratas sindicales, la Iglesia, burócratas sociales, etc. hizo al unísono un llamado sintetizado en una consigna: "A votar!". Toda una verdadera "Santa Alianza por el voto" se extendió desde el PJ a Milei y Espert, desde la UCR, Manes, Máximo Kirchner y La Cámpora hasta el FITU, NMAS y Altamira, pasando por el PRO, Carrió, Bullrrich. Encabezados por el presidente Alberto Fernández, todos hicieron el mismo llamado a las masas.
El presidente Alberto Fernández encabezó la "Santa Alianza por el voto". En la foto usando los medios de comunicación para convocar al pueblo hasta último momento a que acuda a votar
Pero una verdadera rebelión de millones enfrentó, y desafió ese llamado. El motor de la rebelión y el rechazo de millones fueron el hambre, la pobreza, la miseria, la desocupación, los salarios de hambre, la inflación, la desigualdad de la Argentina capitalista de Alberto y Cristina que solo disfrutan un puñado de ricos. Un motor fundamental fueron los jóvenes, y entre ellos, los más pobres, los desamparados, los más oprimidos, las mujeres, quienes están siendo abandonados por el capitalismo, y los partidos que lo defienden.
Pero además, los trabajadores y el pueblo expresaron la bronca, por todas las medidas tomadas ante la pandemia: El "quedate en casa", el "Vacunatorio VIP", las fiestas clandestinas del poder, el rechazo a las medidas capitalistas contra la pandemia que dejaron los más de 100.000 muertos, y ubicaron a nuestro país en los primeros lugares del desastre del COVID-19. El pueblo se tomó revancha de todo ese desastre capitalista
Se hunde el principal sostén del régimen capitalista: El PJ
Esta elección no solo pasará a la historia por ser la de mayores índices de abstención y rechazo a la democracia burguesa, y los más bajos índices de votación. También pasa a la historia por ser la elección en la cual recibió un golpe demoledor el principal partido capitalista del régimen burgués: El Partido Justicialista (PJ). Este partido está recibiendo un profundo golpe, que nunca antes había recibido.
Durante décadas, un sector muy importante de las clases trabajadoras y el pueblo consideraron al PJ como "su partido". El peronismo ha controlado históricamente los principales municipios, y casi todas las más importantes provincias del país. Es el partido de los llamados "barones del Conurbano", una pléyade de corruptos dirigentes que controlan las poblaciones con más densidad de población del Gran Buenos Aires. Es el partido que controla el ejército, la policía, de gran relación con la Iglesia, y junto a ellos que maneja todos los negocios ilícitos de la Argentina capitalista como el narcotráfico, evasión de capitales, trata de personas, contrabando, juego, etc.
Esta verdadera columna vertebral de la Argentina capitalista ha sufrido un golpe demoledor. Su gobierno, encabezado por Alberto y Cristina Fernández tiene por delante dos años de gobierno con un país arrasado. La economía hundida en la crisis, millones en la miseria, y la pandemia que continúa. Hoy, para millones de jóvenes y sectores del pueblo peronismo es sinónimo de hambre, y pobreza, de marginación y desigualdad. Los "pibes" de La Cámpora son ya veteranos corruptos impresentables, y buena parte de su conducción política, comenzando por su principal dirigente Cristina Fernández, afronta cargos por corrupción y enriquecimiento ilícito.
Las imágenes del golpe que reciben el PJ y el kirchnerismo. A la izquierda, el tweet de D'Elía brama por que medio millón de personas en Matanza le dan la espalda al PJ. A la derecha: Mientras da su discurso reconociendo la derrota Cristina Kirchner cabizbaja, símbolo del brutal golpe recibido
Es fundamental que este partido se termine de hundir, como ocurrió con la UCR hace ya 20 años atrás, para terminar de liberar a la clase obrera de las garras de la ideología burguesa de las "conciliación de clases". El peronismo es uno de los viejos partidos burgueses que más ha sobrevivido, producto de que se "salvó" varias veces de la muerte. Cuando su fundador el General Perón comenzaba a mostrar su rostro anti- obrero, sufrió un golpe de estado en 1955 que convirtió a Perón en un "salvador en el exilio", al cual la clase obrera añoró durante décadas. El golpe "salvó" a Perón e impidió que los trabajadores hicieran la experiencia con el nacionalismo burgués.
Cuando Perón regresó en 1973, y comenzaba a organizar uno de los gobiernos más anti- obreros y reaccionarios junto a su mujer Isabel y el fascista López Rega, lo encontró la muerte. En el momento en que la clase trabajadora argentina podía abrir los ojos y comprender que era en verdad el peronismo, la muerte de Perón "salvo" al peronismo otra vez. Cuando el reaccionario gobierno de su mujer Isabel organizo las bandas fascistas de la "Triple AAA" (Alianza Anticomunista Argentina) que asesino a cientos de activistas, vino el golpe de estado militar del 1976. El peronismo se "salvó" otra vez de mostrar su verdadero rostro, y perder el apoyo obrero y popular.
Cuando cayó la dictadura, tras el fracaso de la UCR, el peronismo volvió al poder con Menem en la era de la globalización capitalista. Su gobierno, uno de los más pro imperialistas y entreguistas de la historia llevó al peronismo a una crisis con millones de desencantados. Pero tras el "Argentinazo" del 2001, surgió el kirchnerismo, una corriente que apoyada en la millonaria recaudación por la ventas de soja, armo una imponente estructura clientelar de subsidios que tuvo fuerte impacto en la juventud. El kirchenrismo "salvó" al peronismo una vez más, e incluso lo volvió atractivo para un sector de los jóvenes.
Pero la grave, e histórica crisis mundial del capitalismo se está llevando puestas a todas las organizaciones que durante décadas controlaban a las masas en el mundo. El peronismo no es la excepción. Y el gobierno de Alberto y Cristina, que solo tienen para ofrecer más miseria, y pobreza a millones, tendrá como desafío revertir en noviembre su pésima elección, y llegar hasta el final de su mandato. Hoy el gobierno pende de un hilo, pero ni los partidos capitalistas, ni los reformistas del FITU lucharán por que caiga. Todos se unirán en un pacto de gobernabilidad implícito para que termine su mandato. Resulta crucial derrotar este gobierno capitalista de una vez, y apurar el final del PJ, el nefasto partido capitalista, que ya no tiene "salvador" a la vista.
CUADRO DE LA ABSTENCION Y VOTO EN BLANCO PROVINCIA POR PROVINCIA Y A NIVEL NACIONAL
El cuadro que los partidos politicos y los medios de comunicación ocultan. Las impactantes cifras de la rebelión de las masas. (Datos Ministerio del Interior con el 90% de mesas escrutadas 12/9/21. Algunas datos cambian con el escrutinio final, pero con variaciones menores)
La vergonzosa y lamentable campaña de la izquierda argentina
La Argentina capitalista se encuentra en la crisis más grande su historia. El que alguna vez fue el "granero del mundo", un país riquísimo, hoy se encuentra hundido y destruido por el capitalismo. Las corporaciones, los banqueros y las grandes empresas han hecho un desastre, y han convertido al pueblo argentino en un mar de pobreza estremecedora. Pero si algo caracterizó a la campaña electoral del 2021, es precisamente, en que todos los partido políticos se pusieron de acuerdo en que "de esto no se habla"
El silencio sobre la crisis terminal de la Argentina capitalista convirtió a la campaña electoral 2021 hasta ahora en una de las más huecas, y vacías de contenido de la historia. Candidatos que hablan de "garche", que bailan "dando el paso" en la calle, spots, huecos, con personajes desconocidos que hablan de su vida personal, artistas bailando desnudas frente al Congreso, spots rayanos en lo bizarro. Todo esto caracterizó a la campaña electoral, lo que hizo aumentar el descreimiento, bronca, y desinterés de la población.
De izq a der: Cinthia Fernandez baila frente al Congreso, Tolosa Paz y el "garche", el rapero de Guillermo Moreno, el "trap" de Manuela Castañeira. Las campañas rivalizaron en vacío de contenido, y cual era mas bizarra
La izquierda, supuestamente marxista, tenía todo el terreno a su favor para golpear duramente a los partidos capitalistas, y levantar el nivel del debate político. Lejos de eso, hemos presenciado una de las más lamentables campañas electorales de la izquierda en la historia. La campaña de todos los grupos de izquierda sin excepción, FITU, NMAS, Altamira, Zamora se basó en dos cosas: Por un lado sembrar expectativas en la democracia burguesa, llamando a "votar", "elegir diputados", "presentar leyes", confiar en las PASO, llamar a confiar en los antidemocráticas mecanismos del régimen, en sus antidemocráticas instituciones. Y por otro lado, la campaña de todos los grupos de izquierda estuvo basada en negarse terminantemente a llamar a luchar contra el gobierno.
Ninguna campaña de la izquierda hablo de los banqueros, de las multinacionales, del imperialismo. Apenas alguna tímida mención al "FMI", o un impuesto al agro. Toda una vergonzosa capitulación al capitalismo argentino y mundial. Todos los grupos de izquierda presentaron candidatos que no tienen ninguna representación en el movimiento de masas.
Sus principales figuras no son dirigentes sindicales, ni de organizaciones sociales, ni de ninguna organización de masas. El centro de su llamado fue llamara confiar en la democracia burguesa, llamando a "votar", a "tener bancas", a ser "tercera fuerza". Pero además presentaron toda su política prometiendo "proyectos del Ley" sobre diversas cuestiones, sembrando expectativas en el Parlamento capitalista, intentando prestigiar a instituciones en las que los trabajadores y el pueblo creen cada vez menos.
Capítulo aparte merece que los grupos del FITU hayan llamado a una dirimir candidaturas en la interna de las PASO, una vergonzosa capitulación a la democracia burguesa que ya habían protagonizado en el 2015 con la bochornosa interna "Del Caño- Altamira". En las páginas webs de los grupos de izquierda hubo links del estado capitalista para que la gente pudiera buscarse en el padrón, o saber dónde votar, convirtiéndose en oficinas del régimen burgués
La otra cara de la vergonzosa campaña de la izquierda consistió en la negativa sistemática y total en llamar a luchar contra el gobierno. Llamar a votar contra el gobierno capitalista es un principio de cualquier organización que se precie de marxista. Pero estos grupos, desesperados por votos, dinero, bancas, y construcción de su pequeño aparatito electoral, abandonaron todos los principios sin ponerse colorados. Fue imposible escuchar a sus candidatos acerca de cómo sus bancas serán utilizadas para llevar adelante la lucha contra el gobierno. Ni mencionaban a Alberto o Cristina, su eje fue criticar a Milei, o al PRO.
Los grupos de FITU se niegan a desarrollar la lucha contra el gobierno de Alberto y Cristina, porque capitulan a la presión de la pequeñoburguesía "progresista" que considera que enfrentar y llamar a luchar contra el gobierno, implica "capitularle a la derecha". Temen perder el "voto progresista", que necesitan para tener votos, y bancas. En cuanto a la cantidad de votos recibidos, todos los grupos recibieron mucho menos en relación a las millonarias y costosas campañas que llevaron adelante. Hicieron gastos enormes en relación a su estructura militante, pagaron costosas publicidades en internet, en YouTube, en redes sociales, en afiches, y en relación a los millones que gastaron, recibieron un pobre resultado. Los grupos NMAS, Altamira, y otros, fracasaron, y desaparecieron.
En relación al FITU mantuvo el espacio electoral tradicional de la izquierda argentina del millón de votos beneficiándose de una pequeña parte del viento del voto castigo al gobierno, de los sectores que no quisieron castigarlo votando al PRO. Se beneficiaron de un viento que ellos no impulsaron, porque se negaron a llamar a derrotar al gobierno, y el FITU concentró los votos de un pequeño sector de masas que necesitaba castigar "por izquierda" al gobierno. A su vez, y producto de su negativa a llamar a derrotar al gobierno, no capitalizaron nada de la brutal caída del PJ, su campaña solo les permitió mantener el espacio, estancados en relación al profundo proceso que vive el país, y la clase trabajadora de ruptura con el peronismo.
También les ayudó a mantener el espacio electoral parcialmente la incorporación del MST que cuenta con un pequeño, pero nada despreciable, aparato clientelar de cooperativas similar al del PO, que les aportó votos que habían perdido. Pero la elección no modifica la dinámica de los grupos que integran el FITU, los cuales profundizan su estancamiento, caída en cantidad de militantes, retroceso orgánico, y en la influencia sindical y social.
En forma dialéctica en la medida en que consolidan como aparatos reformistas, con votos y bancas, continúan desarrollando su crisis en relación con las organizaciones de masas, el activismo y la militancia. Este desarrollo en tijeras, de consolidar una estructura de un costoso aparato reformista por un lado, a la vez que pobre en estructura militante y social por el otro, es un dinámica irreversible de todos los grupos reformistas que han roto con el marxismo
La convocatoria del Nuevo PST y La Marx por la Abstención y el voto en blanco
Nuestra Campaña: Más que nunca por la Abstención del voto en blanco
La rebelión de las masas que ha provocado un tembladeral de la democracia burguesa argentina, tiene que profundizarse. Ahora la presión sobre las masas de la "Santa Alianza x el voto" se profundizará. Habrá llamados del tipo "votá porque no gane el PRO", o "votá para que no entre el diputado de Milei", etc. La campaña electoral será nuevamente superficial, vacía y hueca, no debemos esperar que esa situación se modifique, y los grupos del FITU, colaborarán con ese desastre. Pero más que nunca debemos desafiar el llamado de quienes quieren engañar al pueblo con sus mentiras.
El Nuevo Partido Socialista de los Trabajadores y La Marx Argentina reafirmamos el llamado a la abstención y el voto en blanco. Estamos orgullosos de haber hecho este llamado. Saludamos a los miles de activistas que en todo el país salieron a pelear y organizar la abstención y el voto en blanco, porque es fundamental que el gobierno y todos los partidos capitalistas, salgan debilitados de las elecciones, para derrotar su política antiobrera y antipopular. Vamos a seguir desarrollando actividades para organizarnos juntos y llevar adelante esta batalla.
Nuestro eje sigue siendo el llamado a derrotar al gobierno, a darles la espalda a todos los partidos capitalistas, y a la izquierda reformista, que salgan debilitados de esta elección. No importa cuántas bancas ganen, lo que importa es que vastos sectores de la población rompan, con ellos, no les crean más, y crezca su aislamiento social y político. Esta es nuestra batalla, que ha logrado un primer triunfo, y que debemos profundizar. Y a la cual te invitamos a sumarte